Falta de protecció per als periodistes

Lamente enormement la pèrdua el passat diumenge de Ricardo Ortega a Port Príncep (Haití). Era un periodista que hi era a la zona per a informar de les últimes revoltes i va tindre la mala sort de ser alcançat per les bales. La idea d'una emboscada és la més defensada, però no podem oblidar la precarietat en què treballaven els últims reporters morts en conflictes bèl.lics. Les cada dia més pèssimes condicions laborals que sofreixen els corresponsals de guerra i els periodistes en general afebleixen la seua capacitat crítica i dificulten la seua labor.
Mitjançant la subcontratació, moltes empreses pretenen lliurar-se de qualsevol tipus de responsabilitat i sembla que obliden la dignitat que tot treballador mereix per principis.
Des d'ací vull agrair a tots aquells que cada dia ens informen d'allò que passa en les zones més marginades, ja que considere la seua tasca totalment imprescindible, al mateix nivell que qualsevol tipus d'ajuda humanitària. Un esdeveniment exclós del mitjans de comunicació equival a un no-esdeveniment, i sense conèixer una realitat difícilment s'hi pot intervindre. La informació salva vides i evita catastrofes majors.



El següent article sobre la situació laboral d'Ortega crec que és de gran interés, però lamentablement no resulta gens sorprenent.


Ricardo Ortega trabajaba sin contrato, sin cámara y sin equipo

El presidente del Comité de Empresa de Antena 3, José Rubio, ha denunciado que la cadena asuma responsabilidades por las condiciones en que estaba cubriendo el periodista la situación en ese país: «sin contrato, sin cámara y sin equipo».

Lunes, 8 marzo 2004 IBLNEWS, AGENCIAS
La dirección de la cadena aseguró que era un trabajador fijo y que tuvo una licencia especial que revocó cuando se aceptaron sus servicios para cubrir los acontecimientos en el país, volviendo a la situación laboral propia de los corresponsales internacionales. Los compañeros de Ricardo Ortega le rindieron un homenaje ante la sede de Antena 3 con una concentración que finalizó con aplausos y en la que estuvieron presentes el director de contenidos, Javier Bardají y la directora de informativos, Gloria Lomana. Durante la concentración, algún miembro del Comité de Empresa pidió la dimisión del consejero delegado, Maurizio Carloti, que no se encontraba en la cadena porque estaba regresando a Madrid. El presidente del Comité, José Rubio, pidió que se asuman responsabilidades por «la falta de respaldo con que se trabaja en Antena 3». Según Rubio, «Ricardo Ortega trabajaba como corresponsal en Nueva York y fue cesado de ese cargo justo antes de ejecutar el Expediente de Regulación de Empleo y después no tenía destino dentro de la corresponsalía internacional y como consecuencia estuvo a punto de irse dando un portazo; el mismo que le estaban dando a él profesionalmente». «Después solicitó un permiso no retribuido y, en esa situación sin contrato con Antena 3 estaba en Haití. Sin cámara, sin producción, sin teléfono, sin equipo», denunció Rubio. Sin embargo, desde la empresa aseguran que Ortega «no fue en ningún momento despedido de Antena 3, era personal fijo, de plantilla con absolutamente todos los derechos que goza cualquier trabajador de este casa». La directora de informativos de la cadena, Gloria Lomana, explicó que el periodista disfrutó hasta el pasado 28 de febrero de «una licencia, no una excedencia, una licencia especial y voluntaria que él había solicitado por razones personales el pasado mes de diciembre, por un tiempo máximo de seis meses y que voluntariamente podía cancelar». El 28 de febrero pasado, Ortega, divorciado y sin hijos, viajó a Puerto Príncipe (Haití) «por voluntad propia, sin ser enviado por esta cadena de televisión y desde allí se puso en contacto con nosotros, diciendo que nos ofrecía su trabajo y estaba dispuesto a cancelar su licencia especial», explicó la directora de la cadena. «Nosotros le exigimos que tramitara esto por escrito, y lo curso en la misma noche. Desde ese momento, la dirección de Antena 3 regulariza la situación laboral como la de cualquier enviado especial», relató Lomana. «Antena 3 sólo envía a zonas de conflicto a personal de plantilla con todas las garantías laborales y especiales para este tipo de coberturas. Así fue Ricardo Ortega: se le facilitó un seguro especial de alto riesgo. Desde Madrid se intentó hacerle llegar material que facilitara su trabajo, pero esto fue imposible por la situación que se encuentra Haití», subrayó
Preguntada por si Ortega contaba con casco, chaleco antibalas e identificación de prensa, Lomana contestó que «trabajaba con todas las garantías laborales, con toda la cobertura que le habíamos podido ofrecer desde Madrid. Él no había viajado de Nueva York a Madrid para poder recoger otro tipo de materiales como se hace con cualquier otra cobertura en situación normal. En este caso él viajó desde Nueva York a Puerto Príncipe, y desde Madrid le intentamos trasladar el material que pudiera necesitar». «Hicimos todo lo posible para enviarle material», añadió.
Garantías laborales
«Antena 3 acepta el trabajo de una persona que va voluntariamente allí, con todas las garantías laborales, y que ofrece trabajar para esta cadena con la absoluta normalidad con la que un enviado especial de Antena 3 trabaja en zonas de conflicto. Se le intenta enviar el material. Además, estamos pendientes de la Silvio González nos traiga más detalles, nos diga qué había en la habitación, y qué materiales había conseguido», insistió Lomana.
Mientras, se espera que la capilla ardiente con los restos mortales del periodista queden instalados esta madrugada o a primera hora de la mañana en el Tanatorio de la M-30 de Madrid. El avión de la Fuerza Aérea Española que traslada el cadáver del periodista salió a las 06:00 horas (12:00, hora peninsular española) de Puerto Príncipe, según fuentes de la Oficina de Información Diplomática (OID).
Tras una escala en Santo Domingo para repostar, está previsto que el avión llegue a Torrejón a partir de las diez de la noche. Después se procederá a realizar la autopsia del cuerpo y a continuación se instalará la capilla ardiente en el Tanatorio de la M-30.


Si voleu llegir un article més personal sobre Ortega, us aconselle el que Rafael Poch publica hui a La Vanguardia.